La transmisión del coronavirus a través de los alimentos es “muy baja”

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Foto: Archivo

 La transmisión del coronavirus SARS-CoV-2 a través de los alimentos es “muy baja”, aunque el riesgo “cero” no existe, y la mayoría de los casos se debe a las secreciones respiratorias del personal que ha estado en contacto con ellos en algún momento de la cadena.

Lo ha señalado la investigadora Gloria Sánchez, del Instituto de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y ha asegurado que los tratamientos de cocción son eficaces para inactivar el coronavirus.

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“Si nos llega un alimento contaminado, la congelación es la manera de preservar el virus; la congelación no inactiva a los virus”, ha manifestado a EFE la investigadora, quien ha incidido en la importancia de prevenir la contaminación y cocinar bien los alimentos. “Esto es común a todos lo patógenos de transmisión alimentaria, pero el SARS-CoV-2 no se considera de transmisión alimentaria”.

Durante los últimos meses se han sucedido las incidencias en numerosos mercados – sobre todo mayoristas y localizados en China- tras la detección del coronavirus SARS-CoV-2 en productos congelados y acuáticos -pescados y mariscos de mar o de agua dulce-.

Hoy mismo, el principal mercado mayorista de Pekín, Xinfadi, foco de un rebrote de covid el pasado junio, ha suspendido el almacenamiento y la venta de productos congelados y acuáticos ante los repetidos hallazgos del virus en China en los envases de ese tipo.

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Paquetes de cerdo congelado procedente de Francia; camarón blanco de Ecuador; ternera congelada de Argentina; carne de vaca importada desde Brasil; son ejemplos de algunos de los productos en los que se han encontrado restos o trazas del nuevo coronavirus y que han motivado la llamada de atención a la Organización Mundial de la Salud para investigar la presencia del virus en los productos congelados y mitigar los riesgos.

La investigadora del Instituto de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos ha observado que se han detectado muchos brotes entre el personal de empresas cárnicas, y ha observado que cuando no llevan los equipos de protección individual adecuados o no siguen unas buenas prácticas higiénicas pueden estar contaminando, a través de secreciones respiratorias o aerosoles, tanto las superficies con las que tienen contacto los alimentos como los propios alimentos.

Lo que se han detectado, ha precisado la investigadora del CSIC, son trazas del material genético del virus, por lo que no se puede determinar si son infecciosas o no. Efe