La Procuraduría General de la Nación anunció que encontraron irregularidades en la investigación por la muerte del periodista Mauricio Orjuela luego de recibir denuncias por negligencias médicas.
El ente de control remitió el caso a la Superintendencia Nacional de Salud, argumentando que en las investigaciones se pudo establecer que los centros asistenciales donde fue atendido el comunicador si tendrían responsabilidad en su muerte.
Las investigaciones habrían mostrado que en primera instancia el Hospital de Engativá donde fue atendido por primera vez Orjuela el 11 de julio, no contaba con los equipos para hacer un examen médico y sí administraron un medicamento que ocultó el dolor de la enfermedad que padecía lo que deterioró el estado de salud sin presentar síntomas.
Sin embargo, cuando el periodista se remitió a la Clínica 100 al norte de Bogotá, siendo el tercer centro médico que visitaba, también contribuyó a su muerte tras presentar irregularidades con el ingreso para recibir atención médica, luego de ser remitido de la Clínica Shaio por una supuesta obstrucción abdominal.
Luego de pasados seis días de un centro médico a otro, Mauricio Orjuela falleció el pasado 18 de agosto donde el dictmen médico informaba que el paciente sufrió de apendicitis y al tomar un medicamento solo disminuyó el dolor haciendo que pasados los días la enfermedad empeorara silenciosamente, cuando llegó al último centro asistencial ya no tenía signos vitales y presentaba una peritonitis aguda provocando un shock séptico y posterior fallecimiento.





