En el municipio de La Calera, Cundinamarca, algunos líderes sociales denuncian que el espacio público podría ser ofertado para publicidad política generando contaminación visual.
En su pronunciamiento, miembros de la comunidad dice que la Alcaldía y la Registraduría estarían ofertando el espacio público para las vallas publicitarias políticas contaminado visualmente la zona, por lo que piden que se respete el mismo.
Además, la denuncia también relata que por parte de las autoridades locales habría inconvenientes con el Plan de Ordenamiento Territorial que lleva más de tres años y medio y que, según ellos, no ha sido socializado dejando inquietud sobre los proyectos que se quieren llevar a cabo.
Por eso, los habitantes de La Calera pidieron a los entes de control que tomen las medidas correspondientes con la administración municipal para que se encarguen de vigilar las trashumancia electoral y así recuperar la credibilidad en las entidades del Estado.
Sin embargo, frente a dichas acusaciones la alcaldesa del municipio, Ana Lucía Escobar, aseguró que el POT sí ha sido socializado en sus tres etapas (diagnóstico, formulación y participación comunitaria), y que ya fue radicado en la CAR, donde se espera un concepto ambiental para luego pasarlo al Consejo Municipal y alí recibir su aprobación o desaprobación.