Foto: @ricardolozanop
Según el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Ricardo Lozano, en Colombia aumentará la vigilancia de las selvas y bosques para combatir la deforestación y proteger a las especies de fauna y flora que habitan en esas áreas; el país que tiene en su territorio montañas glaciares, la parte norte de la selva amazónica y una cantidad enorme de otros ecosistemas, es uno de los llamados territorios megadiversos del mundo, según las Naciones Unidas.
El Gobierno busca mejorar los controles ambientales, incluido el Pacto Leticia contra la deforestación del año pasado, pese a que firmó nuevos contratos para exploración de petróleo y gas como parte de una estrategia para aumentar sus reservas de energía.
“Vamos a incrementar el monitoreo, el control y no solamente a nivel de la herramienta de satélites sino también presencia en nuestros territorios”, dijo en una entrevista con Reuters Lozano.
Los parques nacionales del país generalmente no están vigilados por guardabosques y dependen de las comunidades indígenas y de unidades militares para su protección; Lozano aseguró que vigilar los cambios en los ecosistemas es clave para proteger la biodiversidad y que no es posible hacer una distinción entre los animales y el lugar donde viven cuando se trata de esfuerzos de conservación.
“Cuando tú cambias el hábitat por supuesto las especies empiezan a ser más amenazadas, empiezan a tener una mayor vulnerabilidad, entonces comenzamos el ejercicio de lucha contra la deforestación, monitoreo de los bosques en el país”, afirmó Lozano.
Los esfuerzos para prevenir la deforestación incluirían mayores multas para los involucrados en la tala ilegal y la minería, así como otras actividades, sostuvo el ministro; Lozano no especificó cuánto aumentarían las multas, pero el Gobierno sancionó recientemente a un maderero ilegal con cerca de 400.000 dólares por talar árboles en unas 566 hectáreas en una zona selvática del departamento del Guaviare, en el sur del país.
El ministro afirmó que los países de todo el mundo deben trabajar junto con las comunidades indígenas para rastrear la condición de las especies vulnerables a fin de proteger mejor la biodiversidad en el futuro; el funcionario defendió una mayor exploración de petróleo y gas como parte de lo que dijo que es una transición energética.
El año pasado, el gobierno firmó 31 contratos con productores de petróleo; “pues como en todos los países, tenemos un proceso de transición energética. Aquí en Colombia también existe el proceso de la transición energética”, aseguró al revelar que el Gobierno espera que el 11% del suministro de energía provenga de fuentes eólicas, solares y de biomasa para 2022.
Colombia, que ofrece las condiciones ideales para la producción de energía solar y eólica, otorgó contratos por un valor de alrededor de 2.200 millones de dólares el año pasado, pero los posibles inversores en energías renovables sostienen que se necesita una gran construcción de infraestructura y apoyo comunitario para impulsar muchos proyectos. Reuters
