En un dolor de cabeza se ha convertido para los habitantes de la localidad de Kennedy, en el sur de Bogotá, la instalación de los nuevos contenedores de basura en la calle.
Según los habitantes, la instalación de estos recolectores incrementó el mal olor en las calles y la aparición de roedores y moscas.
Los residentes del barrio Jaqueline denuncian falta de planeación al momento de ubicar los recolectores, pues según ellos, están sobre los andenes a escasos metros de las puertas de sus viviendas y locales, lo que ha generado que en ocasiones los residuos ingresen a sus viviendas.
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