En medio del caso de Jesús Santrich y su sorpresiva recaptura, se conoció el testimonio de Marlon Marín Marín, que sería la prueba reina que tiene la Fiscalía en contra del exguerrillero en el nuevo proceso que se abrió el viernes pasado tras su salida de La Picota.
El video que se conoció hace algunos días tras la renuncia de Néstor Humberto Martínez sería la primera evidencia, donde se ve a Santrich hablando con Marlon Marín y otro hombre sobre un cargamento de televisores que en realidad serían varias toneladas de cocaína que estaban planeando enviar a Estados Unidos.
La segunda evidencia es la declaración del sobrino de Iván Márquez, quien por medio de una teleconferencia de más de tres horas dijo, “inicialmente hablan de mil kilos, luego de dos mil, luego de tres mil y en total querían diez mil kilos, diez toneladas. La operación de compra de las diez toneladas inició con una entrega de cinco kilos que exigieron los mexicanos para acreditar la calidad de la droga”.
Además reveló, que Santrich se reunió con él para concretar los detalles del envío de droga en el cual ayudarían miembros del “Cartel de Sinaloa”, encuentro en el cual hablaron de un cargamento más pequeño como parte de un adelanto para verificar la calidad del alcaloide que enviarían.
Igualmente, Marín aseguró que la organización de este envío se hizo por medio de un lenguaje cifrado para no llamar al atención ante posibles interceptaciones, lo cual coincide con la acusación de la Fiscalía sobre que Santrich cuando habló de televisores en el video se refería a droga.
Ahora, la Fiscalía le imputará al exguerrillero de las Farc el delito de concierto para delinquir con fines de narcotráfico y narcotráfico, por los cuales pediría medida de aseguramiento en centro carcelario, tras asegurar que esta situación se produjo luego de la firma del acuerdo en 2016 faltando a lo pactado en el mismo por eso sería juzgado por la justicia ordinaria y no por la JEP.
