El universo de los dos años de los niños

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Una mamá mira a su hijo de pocos meses y dice “qué bueno es…es un ángel”. ¡De repente el angelito quiere demostrar que vino a este mundo y que el mundo sentirá su existencia! Comienzan los terribles dos años. En esta etapa serán muy comunes los berrinches y las pataletas. Si los papas no están preparados, además, los berrinches pueden ser de parte de ellos.

Bueno, esta etapa es sumamente normal. Es parte del desarrollo. El niño está buscando ser más independiente y autónomo.

Su frustración se da porque no puede hacer lo mismo que sus hermanos mayores o sus papás. Por eso, es importante que lo comprendamos. Debemos entender que el niño no se comporta mal para ser desafiante sino para ir marcando su propia identidad y dejar de ser una extensión de la madre.

Es muy común que el niño a esta edad: diga no, quiera todo de inmediato, manifieste sus necesidades de manera agresiva, rechace ayuda para caminar o comer, esté más inquieto, esté más travieso, hace todo lo que sabe que no debe hacer, desafía a la autoridad paterna, se desespera y golpea, muerde o lanza cosas.

Entonces, esta etapa pasa como una etapa fluida o como un castigo. Tú eliges y por eso tu actitud es tan importante.

Tanto padre como madre deben dar el mismo mensaje para que no existan confusiones:

  • No te adelantes a sus necesidades: permite que él las exprese, que se sienta independiente.
  • Permite que tome sus propias decisiones: deja que escoja su ropa, que escoja qué actividad quiere hacer (si no altera el orden familiar).
  • Negocia posibilidades alternativas si no puede hacer lo que quiere.
  • Auto control: enséñale comportamientos que le ayuden a auto controlarse como la respiración o bajar el tono de voz.
  • Intenta dialogar y explicarle las cosas de manera clara y concisa.
  • No esperes que este quieto ¡está descubriendo el mundo!
  • Dile no al castigo físico: es un acto violento inadmisible que además no tiene buenos resultados.

Consecuencias:

El tiempo fuera es una técnica que puede resultar interesante ya que se distancia al niño en un espacio de reflexión para que sus actividades cotidianas se vean interrumpidas ya que tuvo un comportamiento inadecuado (berrinches, agresividad, pataletas). Recordemos que máximo 5 minutos es aceptado ya que la percepción temporal de un niño es muy distinta a la nuestra

Disfrutemos esta maravillosa etapa, cada edad tiene su magia y sus dificultades. Después, cuando crezcan, extrañarás los “terribles dos”.

Con información de: bebeabordo.com.co