El pasado lunes, la Fiscalía dio a conocer que, según las investigaciones realizadas, se descartaba un acceso carnal por parte de uniformados de la Policía a la menor Alison Meléndez en el interior de una URI en Popayán.
Según fuentes del ente acusador, después de revisar las cámaras de seguridad del lugar, se logró descartar el presunto abuso sexual que denunció la joven a través de sus redes sociales, y por el que, al parecer, habría tomado la decisión de quitarse la vida.
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Sin embargo, la Fiscalía enfatizó que seguirá realizando las respectivas investigaciones para esclarecer su se cometieron otros delitos como actos sexuales o uso excesivo de la fuerza por parte de los uniformados.
Pero en las últimas horas, según dio a conocer la familia de Alison, hasta el momento no han recibido un informe oficial por parte de la Fiscalía sobre lo que se dio a conocer a la opinión pública. Además, Lizhet Montero, abogada de la familia de la menor, aseguró que no se puede descartar que Alison fuera víctima de violencia sexual.
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“Aquí no hay nada nuevo y eso lo hemos dicho una y otra vez que así se descarte el acceso carnal eso no significa que no exista violencia sexual. No sé en que forma tenemos que hablar las mujeres en el país que entiendan que la violencia no sólo se configura cuando hay acceso carnal”, dijo la jurista.
En ese sentido, Montero recalcó que “los tocamientos indebidos” constituyen en una forma de violencia sexual, por lo que, buscarán que se sigan realizando las investigaciones respectivas y pedirán un informe oficial a la Fiscalía.
