Son distintas las razones que hacen de las lavanderías autoservicio un modelo de negocio interesante para cualquier emprendedor o inversionista. Una de ellas es la necesidad básica que tienen todas las personas de tener su ropa limpia, lavada y planchada.
Sin embargo, a esto se suman las tendencias de urbanización que se toman el país. En el primer semestre de 2019, los colombianos compraron 85.860 viviendas, de las cuales el 60% de estas fueron de interés social (VIS), el 70% de estratos 3 y 4; y el 79% construcciones con áreas inferiores a 70 metros cuadrados.
“Así como se empezaron a urbanizar las grandes metrópolis en el mundo, cada día son más comunes las áreas pequeñas en las ciudades colombianas. Esto indica que la zona de ropa en las viviendas es más limitada y que es mayor la cantidad de ciudadanos que demandan alternativas distintas, más allá de su área privada, para poder tener su ropa limpia”, explica Santiago Mesa, gerente de Lavanti, una empresa especializada en este tema.
Esta compañía ha trabajado por más de ocho años en la creación de soluciones sostenibles en lavandería, a través de una labor de acompañamiento a emprendedores interesados en este modelo de negocio. Debido a su conocimiento y liderazgo en el tema, Lavanti ha logrado llegar a más de 600 clientes de las principales ciudades del país y espera terminar este año con más de 160 puntos de lavandería autoservicio.
“Le apostamos a una industria que está revolucionando en los hogares de todo el mundo. Las lavanderías autoservicio son un modelo de negocio de baja inversión, fácil de montar y de alta rentabilidad, que apoyado en equipos de alta tecnología, impacta positivamente en la vida de las personas y del medio ambiente”, expone Mesa.
Además, agrega que con este modelo de negocio, a diferencia de otros del mercado nacional, los inversionistas no tendrán que contar con un amplio número de personal para su funcionamiento, por lo que los empresarios podrán tener un retorno de inversión rápido.
Lavanti le apuesta a darle acceso a las personas a ropa limpia a través de las lavanderías autoservicio con equipos que reducen el consumo de agua en un 50% y energía en un 30%.
