Medios buscan combatir avalancha de desinformación electoral en España

21114259Elecciones-Espana-Votacion

El líder socialista español, Pedro Sánchez, quiere destruir España, el conservador Pablo Casado busca recortar las pensiones de jubilación un 40% y el liberal Albert Rivera es en realidad un franquista que no ha salido del armario.

Estas tres afirmaciones, y miles más, forman parte de la avalancha de bulos y desinformación que circulan por la campaña de las elecciones legislativas del próximo día 28 y las locales y regionales del 26 de mayo, y que no deja de aumentar cada día.

Después de que la desinformación o los bulos por redes sociales o de mensajería tuviera un papel en las elección de Donald Trump y el referéndum del “brexit” en 2016 o la victoria de Jair Bolsonaro en Brasil el año pasado, los medios de comunicación han lanzado un esfuerzo hasta ahora desconocido en el país para tratar de neutralizar este fenómeno.

TORMENTA PERFECTA

“Hay una tormenta perfecta”, advierte claramente Carlos Rico, profesor de Ciencia Política de la Universidad Pontificia de Comillas (Madrid), quien explica a Efe que hay “una combinación de factores que hacen que este sea un problema muy difícil de arreglar”.

El segundo factor es que “está comprobado empíricamente” que los partidos políticos encuentran más fácil ganar votos atacando al rival que presentando sus propuestas en positivo, lo que genera la “tentación” de realizar campañas negativas.

Finalmente, la democratización de internet hace que “cualquiera puede ser emisor de contenidos”, lo que ha supuesto una pérdida de rigor y control sobre el origen y la veracidad de los mensajes, añade Rico.

Los expertos coinciden en diferenciar las exageraciones, a veces mentiras claras, de las campañas políticas, respecto a los bulos o desinformación (lo que se ha llamado últimamente “fake news”, noticias falsas, un término que prefieren evitar), que se difunden por redes sociales o servicios de mensajes instantáneos.

LOS VERIFICADORES

Un grupo de 16 medios de comunicación han lanzado el proyecto colaborativo “Comprobado”, en el que también se integra Efe, y que es la primera vez en que diferentes medios españoles suman fuerzas en un plan conjunto de este tipo.

El objetivo de los verificadores es que “se viralice más el desmentido que la mentira”, aunque es algo muy difícil de lograr, añade Jiménez, quien alerta de que, además de más verificación, hace falta invertir más en estudios.

También pide educar más a la población, ya que muchas personas que difunden algún bulo “no saben que es falso”, por lo que es importante “que la población sea consciente” de la importancia de sus acciones.

Este mismo mes, la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) aprobó una declaración en la que urge a informadores, editores, medios, políticos y plataformas de internet a combatir este fenómeno, y recalca que “solo el periodismo de calidad puede combatir con eficacia la desinformación”.

En el debate entró el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), una de cuyas unidades, el Centro Criptólogico Nacional español, se dedica a combatir actividades maliciosas por internet y redes.

Esos agentes pueden usar “la comunicación digital para enfrentar a la opinión pública y movilizar el legítimo descontento del ciudadano”, añade la guía, que recomienda tener “pensamiento crítico y cabeza fría” para “no contribuir a difundir informaciones no contrastadas”. Efe