Foto: Archivo
Colombia avanza en el cumplimiento de los requisitos que fijó la Corte Constitucional para reanudar la fumigación aérea de los cultivos de hoja de coca, la materia prima de la cocaína, ya que la considera una herramienta clave en la lucha contra el narcotráfico, dijo el lunes el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo.
El país, visto como uno de los mayores productores de cocaína a nivel mundial, cerró el año pasado con 154.000 hectáreas de hoja de coca y una capacidad potencial para producir 1.137 toneladas métricas anuales, según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.
Aunque el área cultivada cayó un 9% en 2019 a su menor nivel en seis años, la capacidad para producir la droga se incrementó un 1,5% por un aumento de la productividad de las plantaciones. Colombia enfrenta una permanente presión de Estados Unidos para reducir los cocales y la producción de cocaína.
El Gobierno del presidente Iván Duque busca cumplir varios requisitos ambientales y de salud exigidos por la Corte Constitucional para reanudar la aspersión desde aviones con glifosato. Colombia suspendió en 2015 la fumigación aérea con ese herbicida acogiendo una recomendación de la Organización Mundial de Salud, que considera el glifosato como potencialmente cancerígeno y nocivo para la salud y el medio ambiente.
“Estamos avanzando, hemos dado todos los pasos exigidos por la Corte Constitucional, estamos respondiendo a los requerimientos de las autoridades”, dijo el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, en una conferencia de prensa virtual.
Le puede interesar: Corte Suprema asume la denuncia contra senador Pulgar por presunto soborno a un juez
“Reiniciar el programa de aspersión es fundamental, tenemos que señalar que reiniciar el programa de aspersión conviene al país, permitirá seguir avanzado con mucha mayor eficacia en la lucha contra el problema mundial de la droga”, agregó el funcionario, sin revelar una fecha exacta para retomar la fumigación área.
Colombia tiene como meta erradicar en forma manual 130.000 hectáreas de cultivos de hoja de coca este año, un 30% más que las 100.000 hectáreas destruidas el año pasado, pero la incorporación de la fumigación aérea permitiría superar de lejos el objetivo, según fuentes de seguridad.
Hasta el 12 de julio, el país había erradicado casi 45.000 hectáreas de cocales, aunque el ministro aseguró que “la meta se cumplirá”. Reuters
