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Ante la salida de la cárcel en Pensilvania del Exparamilitar “Jorge 40”, Colombia debe agotar todas las medidas posibles para que esto no suceda, afirma José Miguel Vivanco, director ejecutivo de Human Rights Watch para las Américas en Twitter.
A razón de que hoy se cumplirían 12 años de la imputación de cargos por narcotráfico, y que el pasado 9 de diciembre cumplió con su condena, en los Estados Unidos, Rodrigo Tovar Pupo (Jorge 40) pasaría a manos de las autoridades migratorias estadounidenses mientras se decide la deportación de Tovar.
Acusado de haber desviado fondos del sector de la salud, impulsar candidaturas de varios políticos, 22 homicidios en el Atlántico; también el gobierno Estadounidense lo acusa de narcotráfico y pidió su extradición, aunque “Jorge 40” niega su participación en dicho negocio.
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La deportación de Jorge 40 llegaría a Colombia a mediados de octubre, gracias a los vuelos de deportados desde los EE.UU, se afirma que este pediría estar bajo la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), y de no ser aceptado su caso pasaría a manos de la Justicia Ordinaria de Colombia.
