Foto: Archivo referencial
Una fiesta callejera en el centro de Fráncfort (oeste) derivó la pasada madrugada en disturbios y 39 detenidos, al intervenir la policía al producirse una batalla campal entre una veintena de asistentes.
Los incidentes ocurrieron sobre las 00:30, las dos y media de la madrugada locales, cuando se encontraban en la céntrica Plaza de la Ópera unas 3.000 personas.
La mayoría celebraba la fiesta pacíficamente, tal como viene ocurriendo desde que hace unas semanas la zona se convirtiera en lugar de encuentro más o menos espontáneo.
La policía decidió intervenir ante la pelea que estaban librando una veintena de asistentes y tras comprobarse que uno de los implicados yacía en el suelo, informaron hoy fuentes policiales.
Desde un grupo de concentrados empezaron a lanzar botellas y otros objetos contra las fuerzas policiales, mientras otros asistentes aplaudían.
Las fuerzas policiales procedieron a desalojar la plaza, en la que se habían dispuesto contenedores de basura adicionales, vista la experiencia de fines de semana anteriores con concentraciones similares de jóvenes.
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En las últimas semanas se ha producido disturbios en circunstancias parecidas en otras ciudades de Alemania, principalmente en Stuttgart (sur).
Los bares de copas y discotecas de la ciudad siguen cerrados por las restricciones establecidas contra la pandemia del coronavirus. En parte de Alemania se han producido este tipo de fiestas espontáneas o picnics colectivos, más o menos toleradas por las autoridades locales. EF
