Uno de los uniformados que está vinculado a una investigación por abuso sexual contra una menor de 17 años en la ciudad de Popayán, habló con el Periódico el Tiempo y dio sus versiones sobre el polémico operativo que llevó al suicidio a la joven.
El oficial, que pidió reservar du identidad por motivos de seguridad, aseguró que todo el operativo realizado el pasado miércoles en el marco de las protestas está grabado y que no agredieron sexualmente, ni físicamente a la menor.
El oficial también aseguró que tiene la tranquilidad de que el procedimiento que realizaron ese día está enmarcado en la ley, “hicimos lo correcto”, agregó.
Sobre lo ocurrido en la noche de ese miércoles, el uniformado dijo que se encontraban en el sector de la URI sobre las 9:30 y las 10 de la noche.
En ese momento se encontraban realizando el operativo y estaban siendo atacados por un grupo de manifestantes que se encontraban en la URI y que querían ingresar a las instalaciones.
“Entonces, con el ánimo de replegarlos hicimos una avanzada. En esa avanzada encontramos a la muchacha, tenía buso gris con capucha que le cubría la cabeza, nosotros en ese momento pensamos que era un muchacho, que era un hombre”, manifestó.
El uniformado comentó que en el momento de que uno de los oficiales intentan llevar a la menor a la URI, para identificar la identidad de la marchante, se pone muy agresiva, por lo cual se pidió apoyo del ESMAD.
“Ella no colaboró, le pedimos que se dejara conducir, entonces tomamos la determinación de conducirla por la fuerza, un la cogió del brazo, otro del otro brazo, y como ella no caminaba terminamos cargándola”, dijo el policía al diario.
El uniformado añadió que mientras llevaban a la mujer a la URI, la ropa se le iba bajando, por lo cual le pidió a sus compañeros que pararan para que la joven se arreglara.
Por último agregó que, en ningún momento arrastraron ni maltrataron ni golpearon a la mujer durante el procedimiento.
