En una unidad de cuidados intensivos se encuentra un menor de cuatro años luego de que sus padres lo llevaran a emergencias después de una supuesta caída, pero las autoridades actualmente están llevando a cabo una serie de investigaciones en contra los progenitores, ya que el cuerpo del menor presenta laceraciones y úlseras que no corresponderían a una caída.
Según la información preliminar, los padres de familia llevaron al menor al Hospital Niño Jesús, de la capital del Atlántico, asegurando que habría sufrido una caída. Los médicos, a causa de las múltiples heridas en el cuerpo del menor y su condición de sufrir parálisis cerebral, decidieron remitirlo a la Unidad de Cuidados Intensivos del Camino Universitario Adelita de Char, donde permanece desde el pasado 19 de agosto.
Los padres del menor que presuntamente serían consumidores de estupefacientes, según el medio Alerta Caribe, habrían explicado que la caída del niño se dio luego de que su hermano menor de dos años lo empujara. Al parecer, los padres dejaban a sus dos hijos solos durante varias horas.
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Sin embargo, durante las revisiones medicas se pudo evidenciar que los golpes del niño no correspondían a una caída como la que describían sus padres y que tenía múltiples cicatrices que daban cuenta del maltrato que vendía sufriendo meses atrás. Además de las laceraciones y úlseras en pecho y espalda, el menor tenía un hilo atado a sus genitales y presentaba signos de desnutrición, lo que hizo que los médicos acudieran a las autoridades mientras el niño era trasladado a la UCI ante la gravedad de su salud.
El Mayor Fabian Rivero, jefe de la Seccional de Protección y Servicios Especiales de la Policía Metropolitana de Barranquilla, se manifestó ante el hecho confirmando que al parecer se trata de un caso de maltrato familiar, por lo que intervendrá el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Además, informó que se abrió indagación preliminar para establecer la culpabilidad de los posibles responsables.
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Por el momento, le fue asignada al niño de 4 años una madre sustituta que le está brindando el acompañamiento mientras está siendo atendido y se espera que el menor se recupere para poder trasladarlo a un hogar sustituto, donde permanece su hermano de 2 años, quien también está bajo la custodia del ICBF y que fue sacado de la vivienda para restablecer sus derechos.
Las autoridades avanzan en la investigación, mientras que la Defensoría de Familia solicitó el reporte de Medicina Legal sobre las heridas que presenta la víctima.