Se le atribuyen los incendios en La Macarena a disidencias de las Farc

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Foto: @DefensoriaCol

Los bosques de la serranía de La Macarena, donde se encuentra Caño Cristales, considerado como una de las joyas más importantes del turismo nacional, se está viendo fuertemente afectado por los fuertes incendios que se han presentado en la zona. Con respecto a este incidente, que en un principio habría tenido como posible causa a las condiciones climáticas que padece el país por esta época, no sería una ocasional sino provocada.

Según lo aseguró el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, la deforestación masiva de este parque está bajo la responsabilidad de un nuevo acto terrorista perpetrado por un grupo armado ilegal, o en este caso, las disidencias de uno que ya se desintegró en su mayoría, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Desde las jornadas que se adelantaron ayer en este sector del país, las autoridades pudieron capturar a 20 personas que estarían presuntamente involucradas en las conflagraciones del Parque Nacional Natural Tinigua, mismos que fueron capturados dentro de las labores de la Operación Artemisa, donde se encuentran a ocho mujeres y doce hombres, de los cuales estarían algunos de los disidentes de este grupo subversivo.

Los motivos por los cuales estos sujetos estarían cometiendo este acto de ecocidio, se debería al objetivo de ampliar las zonas del departamento del Meta donde se puedan realizar sembrados de coca, para una posterior fabricación y distribución de la pastilla de la droga que se obtiene tras estos cultivos. Por su parte, la Defensoría del Pueblo también se pronunció en contra de estas acciones terroristas en contra del medio ambiente nacional.

“Se exceden todos los límites. El incendio provocado contra la Serranía de la Macarena a la altura de Caño Cristales es un atentado contra la humanidad. La Defensoría del Pueblo condena enfáticamente este hecho y requiere toda la acción estatal para detener su marcha”, se lee en el trino.

Cabe recordar que la gravedad de las conflagraciones en este sector central del país han arrebatado decenas de árboles, variedad de animales que tenían esta zona como su hábitat, tales como venados, jaguares, micos, aves, nutrias, reptiles, y centenares de kilómetros de vegetación natural que permanecía en este parque.